Durante el desarrollo humano, la adultez tardía, también conocida como senectud, es una etapa que refleja un fenómeno que afecta a toda la población: el envejecimiento biológico.
¿Qué pasa cuando te tragas tus emociones?
Desde que somos pequeños nuestros padres y cuidadores nos dan ciertos mandatos que muchas veces por la edad no entendemos y solo cumplimos lo que nuestro padres y adultos desean por obediencia, y muchos de estos mandatos suelen confundirnos. Órdenes como:
Autor:
Barbara Andreina Pacheco
¿Qué pasa cuando no expresamos lo que sentimos? Que aprendemos a tragar nuestras emociones por no molestar a otros, por no ser irrespetuosos y por encajar con los demás. Pero lo triste de todo esto es que aprendiste a tragar tus emociones porque expresar lo que sentías no estaba permitido; es decir, vives llenando de toxicidades tu organismo porque todo lo que te molesta o incomoda de los que te rodean te lo devuelves a ti. Para que lo veas mejor te pondré un ejemplo: es como si te sentaras a comer el plato que menos te gusta pero tienes a la persona que te lo preparó observándote y no tienes otra posibilidad, por lo que te lo tragas todo y tu organismo se siente pesado y revuelto por comer algo que no le agrada. Así se siente tu cuerpo cuando no expresas tus emociones.
Si eres de las personas que se quedan calladas y no expresan lo que les molesta, se entristece o siente miedo, quiero que sepas que tu organismo vive en indigestión emocional y tu cuerpo en algún momento empezará a mostrarte el daño que le estas causando. Algunas de los indicadores pueden ser:
- Inestabilidad en tu peso corporal
- Sentimientos de culpa
- Conflictos contigo mismo entre lo que quieres decir y lo que debes decir
- Dolor de cabeza.
Si este articulo te impresionó, pregúntate: ¿qué tanto he estado tragando?, y ¿cuánta toxicidad le he metido a mi organismo?. Reflexiona qué harás con respecto a esto.
No se trata de ir por la vida vomitándole a los demás; se trata de que puedas expresar tus emociones, apropiarte de ellas y responsabilizarte de las mismas. Se trata de poder sentirnos cómodos con nosotros mismos, nuestras emociones y con nuestro entorno.
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