¿Qué es un sesgo cognitivo?

La mente es el producto final de la interacción de diversos mecanismos y procesos que ocurren en nuestro cerebro. Pensar, amar, hablar, realizar un comportamiento, tomar una decisión, procesar la información por nuestros sentidos (vista, olfato, gusto, tacto y audición), entre otros, son procesos que realiza este órgano central cuya finalidad es poder recabar información del mundo que nos rodea para poder organizarla y dar una explicación a los fenómenos que ocurren a nuestro alrededor. En este sentido de ideas, podemos entender que los problemas ocurren cuando nuestro cerebro no logra explicar los fenómenos que observamos; para solucionar esto, el cerebro utiliza todo lo que está a su alrededor para poder dar una explicación, generando a veces un fenómeno psicológico denominado sesgos cognitivo, pero ¿qué es un sesgo cognitivo? En este artículo te explicaremos qué es y te mencionaremos algunos de los sesgos más estudiados.

Un sesgo cognitivo es una interpretación errónea de la información que ejerce influencia en la manera en cómo procesamos la información, nuestros pensamientos, emitir juicios y en la toma de decisiones. Los sesgos cognitivos influyen en la manera en cómo vemos el mundo y afrontamos los problemas, están determinados por la cultura, la sociedad, la familia, las motivaciones personales, ética, búsqueda de atajos en el procesamiento de información o en las distorsiones en la recuperación de recuerdos. Es decir, son juicios intuitivos fundamentados en el conocimiento parcial, en la experiencia o en suposiciones que a veces son correctas y otras veces erradas, en el cual, no existe una seguridad absoluta y lógica de los mismos. Entre algunos de los sesgos cognitivos más estudiados se encuentran los siguientes:

• El optimismo ilusorio, el cual es un juicio sesgado con respecto al mundo que rodea a la persona. Es un optimismo exagerado y persistente en relación con acontecimientos negativos, en el cual, no hay justificaciones tácitas para valorar el afrontamiento cuya base se sostiene en una visión de invulnerabilidad de que determinados elementos negativos puedan ocurrir a una persona. 
• El pesimismo defensivo, el cual consiste en la adopción de bajas expectativas y metas ante la existencia de una situación futura a afrontar a pesar de que exista un claro registro de antecedentes de éxitos en la persona. 
• El sesgo de confirmación, el cual es la tendencia a favorecer, buscar, interpretar y recordar la información que confirman la propia creencia para subestimar de manera desproporcionada las diversas alternativas existentes.
• El sesgo de proyección, el cual es una fuerte tendencia a pensar de manera no consciente que las demás personas comparten los mimos pensamientos, creencias y valores parecidas a las nuestras.