El proceso del duelo es propio y diferente para cada persona, hasta el punto que en algunos casos debe recurrirse a la ayuda profesional para superar y cerrar este ciclo
Desde el punto de vista psicológico y emocional, el duelo es un proceso complejo que se llega a enfrentar cuando una persona pierde a un ser querido (por motivos de divorcio, separación o fallecimiento).
El proceso del duelo es propio y diferente para cada persona, hasta el punto que en algunos casos debe recurrirse a la ayuda profesional para superar y cerrar este ciclo. Por tal razón, profundizaremos en este artículo el tema referente a las “rumiaciones obsesivas en el duelo”
¿Qué son las rumiaciones obsesivas del duelo?
Se definen como rumiaciones obsesivas del duelo a todos pensamientos repetidos que aparecen en la consciencia de una persona, una y otra vez, tras haber perdido a un ser querido. Por lo general, se caracteriza por generar un estado de incomodidad y ansiedad ya que persisten estas ideas sin obtener una conclusión válida.
¿Cómo aparecen las rumiaciones obsesivas en el duelo?
Comúnmente llegan a presentarse las rumiaciones mediante los pensamientos descontrolados y del tipo intrusivo, es decir, surgen desde la consciencia sin avisar y sin ser deseados por la persona.
Este tipo de pensamientos nacen en la mente de la persona de manera repetida, indicando situaciones, aspectos o elementos que la mente no puede reconocer, como lo son:
1. Las condiciones de la pérdida del ser querido.
2. La relación de lo que se ha perdido.
3. Las consecuencias que traerá la pérdida del ser querido.
Por lo general, se manifiesta a través de las siguientes expresiones: “Todo es mi culpa”, “Y si yo hubiese…”, “Si pudiera volver atrás…”, “Si yo hubiese actuado de otra manera”, “No puedo vivir sin ella/él”, entre otros.
¿Cómo actúan las rumiaciones obsesivas en el duelo?
Frecuentemente se presentan mediante una disposición a buscar respuestas, es decir, la persona explora determinadas situaciones o elementos que justifiquen o le expliquen la causa de la pérdida del ser querido, convirtiéndose en una voz que constantemente se manifiesta en el interior de la persona.
Entre los ejemplos más comunes en los que las rumiaciones se manifiestan podemos mencionar las siguientes preguntas: ¿Qué ocurrió?, ¿Por qué?, ¿Cómo fue?
Igualmente se pueden presentar mediante la fijación por los detalles que caracterizan o describen la pérdida vivida, aunque en la mayoría de los casos se trate de detalles que no son importantes.
A través de estas rumiaciones, la persona se obsesiona con responder a preguntas que seguramente no tienen respuesta, creyendo que dicha respuesta le traerá una sensación de alivio y tranquilidad.
¿En qué se basan las rumiaciones obsesivas en el duelo?
Como su nombre lo indica, se basan en obsesiones, es decir, la experiencia de la realidad se encuentra en la mente. Donde la persona no vive, sino que por el contrario piensa en vivir centrando todo en la mente para buscar respuestas sin lograr poner nada en práctica.
Esta práctica mental se enfoca en unos algunos aspectos precisos de la realidad, que en este caso está relacionado con el proceso del duelo. Como consecuencia, lo que sucede es que se llega a perder la visión normal de la situación, lográndose perder gran parte de la realidad por estar enfocado en considerar solamente una parte de ella.
Lo que se significa que existe una pérdida de la objetividad y la perspectiva, obteniéndose solamente una visión fraccionada de lo que está sucediendo realmente en el entorno de la persona, impidiéndole avanzar con el proceso del duelo para ser cerrado de manera sana.
¿Cuáles son las consecuencias de las rumiaciones obsesivas en el duelo?
Adicional a la fijación que la persona llegar a tener solamente de una parte de la realidad, también existe como consecuencia directa la inacción o pasividad en la cual la persona no actúa sino que únicamente permanece ofuscada en ciertos pensamientos.
También puede presentarse una gran sensación de soledad acompañada de un aislamiento que impide conectarse con la realidad de su entorno (social, personal o laboral).
Las rumiaciones obsesivas en el duelo pueden afectar el comportamiento de la persona que está viviendo la pérdida del ser querido, las cuales se traducen en: hablar con uno mismo o con alguna situación particular, mirar hacia el suelo, perder el contacto consigo mismo o con el entorno.
¿Cuáles son las funciones psicológicas de las rumiaciones obsesivas en el duelo?
Las rumiaciones obsesivas en el duelo son en cierta forma un mecanismo que permite cumplir una serie de funciones psicológicas, las cuales se clasifican en tres grupos:
1. La relación con el trauma de la muerte, para este caso se presentan dos funciones psicológicas de las rumiaciones obsesivas como son: mejorar lo que ocurrirá (predictibilidad) y conseguir un significado a la muerte.
2. La relación con la vinculación, aquí igualmente existen dos funciones psicológicas: la primera que es resarcir la sensación de culpa, y la segunda, continuar la relación (vinculación) con la persona que se ha marchado.
3. La relación con la negación del dolor, en este último grupo se encuentran las siguientes funciones psicológicas: brindar un sentido de estabilidad y control, y estabilizar el ego dependiente y débil que ha quedado tras la pérdida sufrida.
Queremos ayudarte a superar la pérdida de tu ser querido. Si nos aportas más información sobre tu situación podremos
entender mejor lo que pasa en tu relación: