En el transcurso de nuestra vida hemos experimentado fenómenos inexplicables como sentir que alguien está cerca de nosotros. Esto sucede con más frecuencia de lo que imaginamos gracias a la capacidad que tiene el cuerpo humano para hacernos vivir experiencias peculiares, a las cuales el organismo intenta aceptar.
Con el pasar de los años, los estudios en el área han permitido explicar este fenómeno que parece ser real, y del cual hablaremos en este artículo.
La sensación de presencia es un trastorno perceptivo en la que el individuo cree que está acompañado, sin existir algún factor externo que confirme la presencia de este efecto. El caso más frecuente es cuando una persona siente una presencia a su lado, lo que puede ocasionar en la persona angustia y preocupación.
Este fenómeno puede darse tanto en personas de condición mental saludable como en personas que presentan algún daño mental, sobre todo, aquellas personas que sufren de alucinaciones.
La sensación de presencia está relacionada con las distorsiones perceptivas. Las cuales se pueden clasificarse en:
Una persona vive las distorsiones como una apreciación equivocada de la realidad que se encuentra en su entorno. En esta situación, la degeneración radica en que las características físicas de lo que nos rodea, son percibidas de manera distorsionada, siendo importante tener en cuenta los siguientes requisitos para definirla como una distorsión cognitiva:
1. Tener una percepción diferente considerando la distribución física del estímulo.
2. Tener una percepción contraria a la habitual, condicionada por las experiencias vividas.
Como se ha indicado previamente, en las distorsiones cognitivas la incoherencia se presenta como consecuencia de la percepción que realiza el individuo de un estímulo. Sin embargo, en algunos momentos las distorsiones se originan por trastornos temporales dentro del propio organismo de la persona.
En conclusión, las distorsiones son consecuencia de una relación defectuosa entre estos factores:
A través de los constantes estudios se ha podido establecer como responsables de los trastornos a ciertas partes del cerebro y a la corteza frontoparietal, así como también, el sistema límbico, agrupado en la conciencia del individuo, el movimiento y la posición del cuerpo en el espacio; revelando que las personas que perciben este tipo de presencia tienen algún daño o lesión en estas áreas.
Por lo general la sensación de presencia se encuentra relacionada con estos aspectos o variaciones:
Si se llegase a presentar este tipo de trastorno en personas sanas, es común que sea consecuencia a situaciones de cansancio extremo o estrés, o en personas solitarias que no tienen contacto ni estimulación con el ambiental.
De convertirse en un suceso periódico, duradero y con la presencia otros síntomas, es recomendable visitar especialistas en el área para realizar una evaluación adecuada.
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