Síndrome postaborto

Cuando una mujer ha decidido interrumpir su embarazo, naturalmente es una experiencia que resulta muy difícil para ella. Algunos le llaman “síndrome post- aborto”, “trauma post- aborto” o “secuelas post-aborto”, lo cual forman un conjunto de síntomas posterior a este evento que para muchas puede ser traumático. Inmediatamente posterior al aborto inducido, las mujeres experimentan una ambivalencia emocional entre alivio, ansiedad, o miedo. Existen estudios que indican que las mujeres pueden atravesar un sufrimiento agudo, y muchas lo atraviesan en silencio. Posterior a esto, ocurre una desorientación vital, dudas o incertidumbres o preocupaciones ante la posibilidad de un futuro embarazo, fertilidad o propia salud.

Algunas pueden experimentar otras sensaciones negativas producto de este evento que muchas refieren como traumático, doloroso, o confuso. Algunas ocultan por años dichas emociones, usan métodos de defensa como la represión del recuerdo. No suelen comunicarlo o expresarlo por temor de rechazo, juicio, o la propia culpa.

Muchas experimentan sensaciones y pensamientos relacionados al posible hijo que no tuvieron. Proyectan ciertas creencias hacia el hijo perdido. Alguna piensan en el “qué hubiese sido si…” pensando en cómo su vida hubiese cambiado, cómo hubiese sido su infancia o crecimiento.

Atraviesan el mismo proceso de duelo ante la pérdida. Aunque otros estudios muestran que no hay un patrón común en la dinámica post-aborto. Dichos síntomas o cuadro patológico, pueden ser más pronunciados en mujeres con trastornos de base como, depresión, estrés post traumático, baja autoestima, ansiedad, conducta suicida, entre otros. Así mismo, de acuerdo al tipo de apoyo social que haya tenido o al tiempo de este proceso no recuperado, aumentando así la intensidad de estas sensaciones y conductas. Es importante reconocer esta realidad y que la mujer solicite ayuda en este proceso de vida que este atravesando para recibir la ayuda adecuada de un profesional.