Los problemas de lenguaje afectan a la población infantil en diferentes habilidades Los trastornos de lenguaje pueden afectar la escritura, la lectura, el habla, la comprensión y el ritmo, de manera individual o combinados.
Cuando se habla de lenguaje se refiere a un sistema compuesto por símbolos y palabras, hablado, con gesto y escrito, utilizado para llevar a cabo la comunicación. En cuanto al término hablar se refiere al sonido del lenguaje cuando es hablado.
Un elemento fundamental y de vital importancia para que una persona se desarrolle es ampliar su lenguaje.
Los problemas de lenguaje pueden aparecer desde que el niño nace y se prolongan aún ante la presencia de terapia e intervención médica, por ello es de vital importancia asistir a un especialista al detectar las señales para determinar si la dificultad presente es pasajera o permanente en sus primeras etapas.
Entre los problemas que pueden detectarse referente al lenguaje se puede mencionar:
También conocida como disfemia, se refiere a un trastorno relacionado con el habla donde los sonidos, sílabas o palabras duran más tiempo de lo que es normal o se repiten evitando que exista una fluidez en el lenguaje.
También se le llama impedimento específico del lenguaje y se refiere a un trastorno que obstaculiza la capacidad de un niño para desarrollar sus habilidades de lenguaje, provocando un vocabulario muy escaso o nulo, errores de gramática graves y problemas fonológicos, entre otros.
Se refiere a la dificultad para procesar información verbal, donde aparecen rotaciones e inversiones de letras o frases en palabras, generando una velocidad de lectura lenta, problema de escritura, ortografía y al hablar.
Se refiere al trastorno ocasionado por lesiones en zonas del cerebro que tienen el control del lenguaje y afectan de manera importante la lectura, expresión y escritura.
Se refiere a una alteración que complica a la persona para producir palabras por problema de los músculos que ayudan a hablar.
Se refiere a la dificultad para poder entender aquellos sonidos que el oído envía al cerebro.
Se refiere a la dificultad de una persona para que atiendan y expresen el lenguaje. Quien lo padece, presenta un vocabulario muy limitado, además de utilizar frases u oraciones simples y tienen muchos problemas para lograr entender lo que otro le explica.
Muchos especialistas afirman que los trastornos del lenguaje tienen un origen familiar. La genética referente a las discapacidades del lenguaje y los problemas de atención están muy vigentes.
En el área de lectura es donde se presenta una mayor cantidad de problemas de lenguaje. El cerebro necesita de conectividad, espacio y evolución para aprender a leer.
Cuando un niño no se expone a una riqueza de vocabulario puede experimentar muchas dificultades a futuro. Además, muchos especialistas alertan sobre la importancia del papel de los padres y maestros ante la presencia de dificultades con el lenguaje.
Cuando un niño presenta problemas de lenguaje puede sufrir muchas frustraciones, por ello es importante el papel del maestro al momento de revisar una evaluación donde detecte una mala redacción o errores de ortografía. Además, se les hace muy difícil entender a los demás y hacerse entender y pueden llegar a tener mal comportamiento, encerrarse en sí mismos y sentirse muy indefensos. Si el trastorno del lenguaje está acompañado de trastornos por déficit de atención, TDAH, ansiedad o trastorno del espectro autista los problemas de lenguaje y habla se agudizan.
Los padres, cuidadores y maestros son el modelo a seguir para los niños, estos aprenden el lenguaje principalmente de lo que escuchan cuando otros hablan, poniéndolo en práctica. Si los niños escuchan muchas palabras refuerza su lenguaje y sus habilidades cerebrales.
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