Existe diferencias de importancia entre el dolor y el sufrimiento. muy seguramente haya escuchado que el ¨sufrimiento es opcional y el dolor inevitable¨. Ciertamente a muchas personas les causa confusión, pues no en toda ocasión nos resulta sencillo entender la diferencia entre el dolor y el sufrimiento.
Son conceptos que en muchas ocasiones podría creerse que aparecen juntos. La reacción de cada ser humano hacia el dolor o el sufrimiento, está muy relacionado a las experiencias que les ha tocado vivir. Tiene cierta relación a todo lo que aprendemos gestionando capítulos de cambio y de frustración.
La noción básica es que si en la vida afrontamos un dolor que nos afecta o pasamos por situaciones difíciles, aprendemos a resistirlo y a sobrellevarlo para lograr sacarlo de nuestra vida, de forma contraria, este dolor se nos convierte en sufrimiento.
Dolor
El dolor es profundo, silencioso, se vive fuerte sobre todo en pérdidas, sobrellevar el dolor es saludable, no se puede reprimir ni evitar, El dolor forma parte de un proceso de sanción en la vida, es parte de la vida, nos permite crecer, fluir y madurar. Si logramos identificar que nos ocasiona el dolor y aprendemos a sobrellevarlo, estaremos viviendo con aceptación, podremos seguir con nuestra vida luego de un fuerte experiencia.
El dolor es un sentimiento que nos denota que alguna situación que nos afecta se debe revisar, De ser un dolor puntual es por cumplir una función protectora, el dolor también se manifiesta como una reacción ante una lesión o un golpe que hace que nuestro cuerpo reacciona activando un mecanismo de defensa para sanar. Cuando el dolor es crónico o continuo nos está notificando que tenemos que cuidarnos mejor.
Sufrimiento
Este tiene un carácter ruidoso, metal, lleno de impulsos cargados de mensajes perjudiciales. Con el sufrimiento queremos controlar, aferrarnos, decimos no ante la vida, al cambio, a la pérdida, en estos momentos nos deprimimos, nos agotamos.
En sufrimiento, nos estancamos, nos quedamos en la no aceptación llegando a boicotearnos para no ser feliz. Cuando sufrimos, nos llenamos de un discurso mental muy dañino en contra de nosotros mismos y también hacia los demás, nos llenamos de rencor, de prejuicios, reproches. Para que estemos en constante sufrimiento, tenemos que aprender a soltar y a madurar.
Uno es temporal, el otro puede eternizarse
El dolor es una reacción que se considera natural y dura un tiempo determinado. aparece en consecuencia de alguna situación en específica y puede desaparecer poco a poco lentamente. Cuando afirmamos que el tiempo lo cura todo es una cosa muy cierta si se hace referencia al dolor, pero no sucede lo mismo con el sufrimiento.
El sufrimiento se fundamenta en la resistencia, y esta resistencia es la que impide que logremos salir de un abismo o de la oscuridad. podemos eliminar una emoción negativa comenzando por la aceptación, atravesar y aceptarla. si os aferramos en reprimir o negar nuestras emociones, el malestar será más grande. Al confrontar un dolor, causado por una ruptura en una relación, nos causa una gran tristeza que no debemos dejar que se transforme en sufrimiento y que éste nos controle.
El sufrimiento nos impone pensamiento negativos como no volveré a ser feliz, está algo mal en mí, no estoy a la altura. Y así, vamos viviendo con esta negatividad de creencias, que nos dificulta el poder sentirnos mejor.
El sufrimiento es creado, el dolor es natural
La primera diferencia entre dolor y sufrimiento es su comienzo, El dolor es ¨una reacción natural¨ frente a un acontecimiento desagradable o inesperado. Perder una relación de importancia, perder un ser amado, quedarnos sin empleo son situaciones donde el dolor es normal que aparezca. Por lo que en general cualquier tipo de sentimiento de pérdida nos afecta y nos causara dolor. Pero este es una reacción con la que debemos aprender a vivirla y dejarla a un lado.
Por otro lado, el sufrimiento es una reacción que creamos por resistirnos al dolor. Nos causa incomodidad tener que afrontar emociones negativas y es por esto que hacemos resistencia a ellas. En lo posible tratamos de eliminarlas lo antes posible, y si no lo logramos, nos sentimos caer en un gran sufrimiento.
Dolor y sufrimiento: uno nos fortalece, el otro nos destruye
Seguro hemos escuchado la frase «lo que no nos mata te hace más fuerte» esta frase contiene solo una parte de la realidad. Para lograr fortalecernos ante un problema o una adversidad se necesita hacer una reflexión que le de sentido lógico. Es fundamental realizar un análisis de los acontecido, entender y sacar el aprendizaje de la situación.
El dolor, nos fortalece tanto así, que nos hace realizar una retrospectiva de nuestro comportamiento y de la dirección que le demos a la vida. Debemos demostrarnos que tenemos la capacidad de afrontar cambios, fortaleciendo nuestra autosuficiencia.
Cuando permitimos que el sufrimiento nos domine nos sentimos victimizados por la vida injustamente e incapaces de manejar los sucesos que causa sufrimientos. esto nos lleva a ser impotentes y sentirnos débiles. El sufrimiento consume y destruye.
Se puede escoger
Por fortuna, siempre tenemos en nuestras manos la opción de decidir entre dejarnos dominar por el sufrimiento o afrontar el dolor. Si toda la vida hemos estado sumergidos en una gran agonía por cada contratiempo, estamos en la capacidad de decidir cambiar la realidad.
Recordemos que esta bien en algunas ocasiones estar decaídos, pero no debemos permitir a los pensamientos negativos definir nuestra forma de actuar. Hay que desechar todo lo que nos hace sentir mal en ciertas circunstancias y sustituirlos por nuevos pensamientos contra la adversidad que nos permitirán crecer y avanzar con nuestra vidas.
Debemos permitirnos sentir el dolor y aprender a afrontarlo, No se debe resistir ni huir simplemente hay que afrontarlo.
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