La realidad de la psicología ante la pandemia

Durante los últimos meses en que hemos atravesado socialmente esta pandemia, ha ocurrido un aumento significativo de la asistencia de las personas al servicio de psicología por diferentes motivos y problemas que le ha tocado vivir, de acuerdo a sus situaciones y realidades. Como lo han sido; problemas de pareja, ansiedad, desempleo, entre otros. Ha sido durante estos meses en que mundialmente se ha reconocido que la salud mental fue y ha sido la más afectada y la que ha estado sobre la mesa permanentemente durante esta crisis mundial.

Países o sociedades que no tenían la cultura de priorizar la atención psicológica, se han visto promoviendo e incentivando usando mensajes y campañas para reconocer la importante de la ayuda profesional psicológica. Personas que veían como tabú la salud mental o asistir a terapia, ha asistido o aceptado la importancia de esta ciencia para llevar el ritmo de vida y lo fundamental que es para nuestro día a día.

La psicología ha cogido fuerza y los profesionales de la salud mental hemos estado trabajando sin parar, paciente tras paciente. Problemas tras problema, y es que algunos estamos “tras cámaras” como se dice, ayudando y ofreciendo herramientas y nuestra mejor atención para ayudar a la mayor cantidad de afectados que se pueda. Niños, jóvenes, adultos, trabajadores, ancianos, todas han sido afectadas, y la psicología ha marcado su pase de importancia y relevancia como nunca antes.

Y es que para que una economía, empresa, familia, colegio, negocio o deporte, funcione, existe detrás un capital humano, una persona que hace todo esto funcionar, usando toda su energía mental. Es por esto y mucho más, que el ser humano, emocional y racional, requiere el apoyo psicológico ahora más que nunca.

La parapsicología, o la psicología online se ha posicionado y son cada vez más los pacientes y usuarios que recurren a este medio. Definitivamente, el bienestar mental poco a poco se convierte en una gran importancia, y los psicólogos son respaldados por organizaciones mundiales y la sociedad misma.