¿Qué es la abstracción selectiva y cómo nos afecta?

¿Qué es la abstracción selectiva?

El filtraje es también conocido como abstracción selectiva, es una clase de distorsión cognitiva. En estos casos, se centra toda la atención en los aspectos negativos, obviando los aspectos positivos o el resto de la información de la verdad a la cual nos enfrentamos. Cuando se recurre a la abstracción selectiva, no solamente nos fijamos en todo lo negativo, sino que también lo magnificamos. De esta manera, realizamos un filtro de la información percibiendo nada más los aspectos negativos.

Como toda distorsión cognitiva, esta forma de pensar no corresponde a la realidad; aun si, nuestro cerebro realiza una interpretación de la información recaudada como verdadera, correcta y única. Este tipo de distorsión pueden estar vinculadas a una falta de autoestima que potencia una visión particularmente negativa del contexto.

Las personas con esta distorsión cognitiva, creen poderse justificar creyendo que fijándose en los aspectos negativos tendrán menor riesgo de sentirse decepcionados o también por sentirse mejores al observar imperfecciones en otras personas, porque tienen una autoestima baja. 

¿Cómo nos afecta la abstracción selectiva?

No soportan la impuntualidad, no toleran las mentiras, les molesta que las personas sean conformistas. Se pueden sentir agredidos por los errores que cometen las demás personas, así mismo se pueden sentir indignados.

Las personas con esta distorsión cognitiva se muestran, muy frecuentemente, enfadadas. Es común que tengan toda una lista de las cosas que les indigna o de lo que no soportan.

La abstracción selectiva no se dirige únicamente al mundo exterior, esto también podemos terminar aplicándolo a nosotros mismos. Esta situación conlleva como resultado que esas personas que decimos que se inventan una historia en su mente. Dicho de otra forma, son los que suelen imaginarse el desenlace de todas las experiencias y situaciones como algo negativo, o en dado caso, algo terrible.

Mantener la mente con un registro de abstracción selectiva, nos podría llevar a un estado de enojo y frustración. No es una situación que enriquezca la vida de alguna forma, mucho menos un tipo de pensamiento que se vaya a desarrollar o cultivar. Muy por el contrario, lo más recomendable es erradicar esos pensamientos de nuestra mente, para llevar una vida más relajada y plena.

Para lograr esto, como con todo comportamiento mecánico, debemos tomar conciencia de lo que incurrimos, conocer cuál es el valor que le doy a los aspectos negativos en las situaciones y las personas y si realmente las cosas negativas merecen aprecio y no las cosas positivas.

Cuando se acepta y reconoce la existencia de la abstracción selectiva en nuestros pensamientos, el siguiente paso es proceder a una auto-observación. Así poder definir y detectar si esto nos pasa con todo o si solo nos ocurre en circunstancias determinadas.

Con este comportamiento auto vigilante, nos permitiremos percatar todo aquello que ocasiona la distorsión. Seguramente descubriremos que el mecanismo se dispara en momentos o circunstancias que nos causan inseguridad.

Llegado este momento en que reconozcamos que solo estamos fijándonos en lo negativo, estaremos preparados para dar otro paso, y es comenzar a ver lo positivo y bueno de cada circunstancia.