¿Qué es la psicocardiología?

Las enfermedades vasculares son una de las principales causas de muertes en el mundo. El desarrollo y aparición de un evento cardiovascular en una persona es debido a factores hereditarios y aspectos psicosociales tales como: las características de personalidad, el estilo de vida, el control de las emociones, las habilidades para manejar estrés, entre otros. Motivo por el cual, es necesario la ayuda médica y psicológica.

La psicocardiología es una rama de la psicología de la salud que tiene como objetivo detectar los factores de riesgo psicosociales que influyen en el desarrollo y aparición de las enfermedades cardiovasculares y en las secuelas de estos. Esta rama se interesa por la relación de la persona con su enfermedad y busca brindar ayuda mediante la información acerca de las características de la misma, de su causa, de cómo prevenirla, cómo enfrentar el tratamiento y de la importancia de la rehabilitación.

Gracias a esta rama de la psicología de la salud, hoy en día conocemos que existe un patrón de conducta que está asociado a las enfermedades cardiovasculares y que se caracteriza por la presencia de rasgos de impaciencia acentuada, competitividad, orientación al logro, baja tolerancia a la frustración, hostilidad, hiperactividad y control. También, algunos factores emocionales, tales como la depresión, la ansiedad, la hostilidad, la ira y el enojo, influyen en la aparición de ateroesclerosis, el cual es, una afección frecuente que aparece cuando una sustancia pegajosa llamada placa se acumula en el interior de las arterias. Aunado a esto, la presencia de estrés tanto agudo como crónico puede conducir también a la aparición de enfermedades cardiovasculares.

Tener una buena salud mental es importante, ya que, nos permite realizar comportamientos saludables que son factores protectores y nos alejan de desarrollar alguna enfermedad. Sin embargo, prevenir no solamente es necesario. Cuando una persona ha sufrido un evento coronario, la rehabilitación es primordial, por lo que, la intervención médica y la ayuda psicológica permite que la persona pueda superar el impacto emocional provocado por el evento cardíaco, modificar sus hábitos de vida y reactivar sus actividades sociales. 

Recordemos, una buena salud mental nos ayuda a tener un corazón más sano y fuerte. No dudes en consultar con tu psicólogo para conocer más sobre el tema.