Las vacaciones están relacionadas con diversión, alegría y felicidad; sin embargo, esto puede dar un giro completo hacia sentimientos negativos
En general, las vacaciones están relacionadas con diversión, alegría y felicidad; sin embargo, esto puede dar un giro completo hacia sentimientos negativos de frustración, rupturas, estrés y presiones. Esto ocurre en el caso de parejas, debilitadas por el estrés y la falta de comunicación, que crean tensiones durante periodos prologados de convivencia.
En los periodos de vacaciones aumenta el tiempo de convivencia en las parejas, se incrementan las experiencias compartidas (como conversar y comunicarse) y se espera en muchos casos reducir los problemas en las parejas. Sin embargo, en ocasiones ocurre todo lo contrario; muchas parejas se percatan de la distancia que hay en la relación con su pareja y aparece el sentimiento de querer escapar de esa situación.
Aquellas personas que han pasado por rupturas confirman que es un proceso que lleva un tiempo. Además, los problemas que no se resuelven en las parejas se intensifican cuando la convivencia aumenta; por ejemplo, durante las vacaciones.
Altas expectativas pueden causar conflictos de pareja
Habitualmente, las parejas con problemas recurren a muchas acciones; por ejemplo, vacaciones para recuperar el brillo que tenía la relación al comienzo. En el caso de las mujeres, ellas esperan recuperar la ternura y atención de su pareja y los hombres se inclinan más por recuperar la pasión.
Estos deseos y expectativas son muy altos en la mayoría de los casos. Muchas parejas, no toman en cuenta los factores que implican gestionar y organizar las vacaciones, los cuales traen también conflictos.
Compartir las 24 horas del día no siempre es lo más recomendado, pues algunos pueden sentirse asfixiados mientras que otros lo ven como una gran oportunidad para pasar tiempo juntos. El verano es un momento donde las rupturas, nuevos comienzos e infidelidades aumentan.
¿Por qué se incrementan los problemas de pareja durante las vacaciones?
Cualquier excusa es válida para iniciar un conflicto en la pareja: antes, durante y después de las vacaciones exitosas o no, cualquier pretexto con o sin trascendencia es bueno para comenzar una discusión o conflicto.
Esto hace que las vacaciones se conviertan en días de desilusión que aumentan las crisis en las parejas, llevando la relación incluso a su fin.
Algunas parejas estables, aparentemente felices y enamoradas, después de vacaciones deciden tomar rumbos separados. Esto sucede, quizás, porque no están pasando por el mejor momento de su relación, se encuentran distanciados, aún viviendo juntos. Hacen su vida por separado y para arreglar las cosas toman la decisión de ir de vacaciones para solucionar la situación.
Esto es un grave error que provoca la separación al regreso del tiempo de descanso, pues salen a flote los reclamos, reproches y discusiones que tienen guardados en su interior desde hace tiempo. El hilo de comunicación se pierde por el distanciamiento.
Por otro lado, están las parejas que comparten todo; parecen perfectas, compaginan su tiempo, actividades, trabajo e inesperadamente al regreso de unas vacaciones se separan. En general, este tipo de parejas son independientes y solo están unidas por compromisos sociales y familiares, pero la verdadera comunicación queda en un segundo plano.
En ambos escenarios es la falta de tiempo de calidad lo que le pasa factura a la relación. El estrés generado por las ocupaciones y actividades del dia a dia activa una bomba de tiempo que genera enfrentamientos entre las parejas por cualquier motivo; asimismo, la falta de cuidado de la pareja es otro factor a tener en cuenta.
Sumergirse en la rutina diaria hace pasar por alto emociones y experiencias vividas con la pareja. Las vacaciones representan etapas de refuerzo de sus relaciones, que se encuentran muy debilitadas. Puede ser una oportunidad para lograr la reconciliación y aliarse nuevamente para reavivar la pasión y el amor. Es más, muchas parejas fundan bases más sólidas en su relación y una nueva etapa. Por lo tanto, no todo es negativo y suele depender de la situación de la pareja, pero sí que se pueden afianzar y mejorar sus relaciones.
Vacaciones y la familia
Muchas parejas dedican su tiempo de vacaciones para compartir el tiempo con su familia. Esto puede ser un momento de mucha felicidad o puede ser el motivo de problemas cuando existen los conflictos familiares, que pueden desencadenar en diferencias y disputas que se han presentado por inconvenientes ocurridos en el pasado. Algunas parejas quieren mostrar una imagen ante sus familiares de su pareja, y si estas expectativas no se cumplen se genera una gran desilusión y eso daña aún más la relación, disminuyendo la confianza en ésta y aumentando la distancia entre la pareja.
Lo que aleja a las parejas no son las vacaciones en sí sino todos los problemas y conflictos previos que vienen generando un desgaste.
Queremos ayudarte a superar tus problema de pareja. Si nos aportas más información sobre tu situación podremos
entender mejor lo que pasa en tu relación: