Duelo y Covid

Llevamos más de 1 año enfrentándonos a esta situación sanitaria del COVID que nos ha llevado a permanecer en confinamiento por largo tiempo y aun no se sabe con exactitud cuento más, generando ello cambios en nuestros estilos de vida e iniciando otros hábitos como: 

• Trabajo en casa
• Estudio en casa
• Pocas o nulas salidas a socializar o compartir con familia extensa

Lo que se conoce como la “nueva normalidad” no es más que, como seres humanos nos hemos adaptado a estos cambios, generando nuevas rutinas, nuevas maneras de relacionarnos e interactuar, dejando a un lado lo que conocíamos para empezar a reconocer e implementar nuevas estrategias de afrontamiento.

 Así mismo, esto nos ha llevado a enfrentarnos a diferentes perdidas como: 

• Estabilidad económica
• Estabilidad laboral
• Individualidad e independencia
• Perdidas de familiares

Por lo tanto, hemos tenido que experimentar un proceso de duelo, proceso que hemos hecho casi de manera inconsciente, pasando por las diferentes etapas de duelo: 

1. Crisis o shock al conocer la noticia del virus
2. Negación de la situación que se vivió en el momento del inicio de la propagación del mismo 
3. Ira o protesta por no poder seguir con la vida como la conocíamos hasta el momento
4. Tristeza o depresión, por ver que por más que se quisiera, esta situación no tiene un fin todavía y no se puede ver un posible futuro claro con respecto al control de ello.

Estas etapas no tiene porque presentarse de forma consecutiva. puede superarse una y regresarse nuevamente a la anterior. Así mismo se puede repetir el proceso desde el inicio, pues aun tenido la vacuna contra el COVID nos damos cuenta que en determinadas partes del mundo aún hay restricciones y aislamientos, lo que nos genera incertidumbre.

Teniendo en cuenta lo anterior podemos ver que en este tiempo que llevamos en confinamiento y cambiando nuestras vidas, se ha incrementado la ansiedad, depresión, miedo a salir y arriesgarse a un posible contagio y otras molestias emocionales que deben ser trabajadas en psicoterapia.